Reparar grietas

Consejos de bricolaje para cubrir grietas o tapar agujeros en las paredes. Antes de colocar un revestimiento en paredes, hay que reparar la superficie. si la pared tiene pequeñas grietas, debemos repararlas con una pasta tapagrietas.
En esta ocasión se explica cómo solucionar los problemas ocasionados por las grietas para poder pintar o revestir las paredes con papel pintado y que no se noten las imperfecciones.


A la hora de sellar las grietas se puede aplicar un tapagrietas universal o bien fabricar de forma casera uno con cemento blanco y agua. Si se opta por lo segundo, habrá que espolvorear el cemento blanco en la cantidad de agua indicada por el fabricante y remover hasta conseguir una pasta uniforme y sin grumos.
Para fisuras demasiado grandes suelen emplearse bandas tapagrietas, que previenen en mayor medida su reaparición.
Primero, agrandar la grieta para conseguir una buena adherencia. Con una espátula o cuchillo, llegar hasta el fondo de la grieta y eliminar los restos y el polvo.

A continuación, humedecer ligeramente la superficie para que el tapagrietas fije mejor. Hacer la mezcla justa para no desperdiciar material. Una vez la pasta está a punto, con apariencia homogénea y sin grumos, aplicar cuidadosamente con espátula estrecha sobre las grietas o fisuras. La espátula debe presionar y posteriormente alisar la pasta hasta conseguir el nivel con el resto de la pared. Si se necesita otra aplicación, dejar secar la primera, teniendo en cuenta que el tiempo de secado aproximado es de 1 hora por milímetro de espesor.



Por último, cuando la pasta esté seca, pasar un papel de lija fino que uniforme toda la superficie. El trabajo se realiza mejor envolviendo la lija en un pequeño taco de madera
La granulometría: en función del proceso de restauración en que nos encontremos deberemos utilizar un determinado papel de lija. El grano gordo (30-60) lo utilizaremos para el pre-lijado de superficies no cepilladas, así como en la eliminación de pinturas antiguas. El papel de grano media (80-100) es para la eliminación de pinturas a pistola. Para lijar a mano deberemos utilizar un bloque de plástico o corcho al que sujetar el papel de lija. De esta manera ejerceremos una presión constante sobre la superficie y así evitaremos hacer hendiduras.